miércoles, 13 de octubre de 2010

¿Y KARELIA QUÉ?

                                              

            KARELIA EN SIBERIA: ANDANZAS




                                             
La imagen precedente es una síntesis de esas andanzas.

Recordemos su entrada  , en el distrito Siberiano de Tomsk el 19/5 (1). Esperábamos se asentara definitivamente, en las  proximidades del núcleo rural maderero de Omuhnoye pero el 27/5 (2) se nos desplaza  5,5 Km hacia el NO lo que valoramos como un erratismo primaveral, y sin relación a los vuelos descritos en la emigración  prenupcial.
Posiblemente la explotación maderera tal vez la sequía o ambas cosas la hicieron buscar otra zona más acogedora, desplazándose unos 5 Km al NO. Argos nos la localiza allí el 29/5 (3) y allí permanece hasta el 31/7 (4) .

En este paréntesis de tiempo 29 de Mayo a 31 de Julio, la primera pregunta que nos hacemos es: ¿Habrá criado?, y desafortunadamente no podemos responder, pues no tenemos ningún elemento de juicio, para responder a ese interrogante.
Nuestra opinión y solo nuestra, es que, para considerar probable o más bien demostrable  una nidificación de becada en seguimiento RTVS, tiene que haber suficiente número de capturas precisas (1,2,3 ),con la calidad suficiente en el tiempo y espacio, que se acomoden a nuestros conocimientos sobre la nidificación, horarios de permanencia en nido y los abandonos, necesarios para la alimentación. Abandonos que según los autores oscila entre media hora y hasta tres cuartos de hora en las penumbras del atardecer y amanecer.
Tres serían pues los requisitos para demostrar esa nidificación:

A) Dos o más capturas diferentes precisas (  loc 1,2, o 3 ) en pases sucesivos de los satélites las 24 horas en el mismo lugar (nido) y solo con los márgenes de error que nos señala Argos.
B) El sensor de movilidad sin acusar desplazamientos y el de temperatura, por encima de la ambiental. No sea que confundamos estancia en el nido con muerte.
C) Si al mismo tiempo o en días sucesivos  en horas de amanecer o atardecer coordenadas y el sensores nos dicen que se movió ya nos animaría a pensar en posible nidificación.

Lo que de ninguna manera podemos estar de acuerdo es que la ausencia de capturas o silencios, se pueda relacionar con nidificaciones, porque esté escondida en el nido y la vegetación espesa pudiera interferir  en las emisiones  recepciones.  Este argumento se invalida desde el momento en que sabemos, que los nidos están en pequeños claros del bosque y que los nuevos paneles del PTT no necesitan exposición directa al sol para una carga eficaz.
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En estos dos meses (se puede ver en la imagen ) las capturas de señal en relación a los meses pasados durante su emigración prenupcial fueron 33 y solo 4 con calidad de precisión (dos 2 un 3 y un 1), cuando en el mes de Mayo, recibimos 60 con más de quince de buena calidad precisión.

Ninguna de ellas cumple las premisas señaladas A B y C. Por lo tanto nuestra conclusión  es que aplicada esta lógica a Karelia, solo podemos decir, que en esos dos meses y medio (29/5-31/7), sí fue posible y  también probable la nidificación pero con los datos en la mano no tenemos idea ni cuando ni en donde.

No creo que tardando mucho los avances de la RTVS-CCB, nos permitan sin lugar a dudas seguir las diferentes etapas de la nidificación de una o más becadas. Si hace pocos años solo era un sueño el simple seguimiento migratorio. (Enlace)  y hoy ya es una gran realidad, el seguimiento de la nidificación también lo será.

Incluso afinando científicamente, el informático, miembro del equipo y presidente del CCB Felipe Diez, diseñó un pequeño y fácil software, para elaborar elipses de localización, cuya superposición, nos daría la localización del nido con un margen de error, mínimo lo que en su día hizo posible la recuperación del PTT perdido en el distrito ruso de Karelia. Véase el enlace . Pero lo dicho necesitábamos datos precisos y no hubo

Y siguiendo con las andanzas  a partir de esa fecha, 31 de Julio último día de estancia en la zona bosque, supuestamente de cría y de la cual tenemos constancia hay  un largo paréntesis, una espera interminable, sin recepción de ninguna señal, (que nos hacía temer también  lo peor ) hasta el 29 de Agosto cuando Argos con una localización muy precisa de 3 (menos de 250m) nos dice que está en la margen izquierda del Gran Río Obi.
Como podemos ver en la imagen, recorrió 120 Km,en dirección NO. Ese erratismo postnupcial ya está muy bien descrito por Fadat  en sus dos publicaciones la Becasse en Hiver y la reciente Vie de la Becasse  des Bois, No se debe confundir con los dos  movimientos migratorios clásicos. Pre y postnupciales.En la imagen podemos apreciar desplazamiento y biotopo en uno de los abundantes meandros del Obi, con vegetación de rivera, brazos de rio curvos paralelos, con  lagos y lagunas entre ellos donde hay de todo menos sequía
La estancia en la margen izquierda del gran OBI dura casi un mes. Otro largo paréntesis, hasta que el 27 de Septiembre, nos dice que comenzó su viaje de regreso, aunque la 1ª etapa es pequeña, pero en clara dirección de emigración postnupcial hacia el O, seguida  hasta la fecha de otras etapas, paralelas al trayecto de ida. La noticia ya está publicada y descrita en la Web CCB Scolopax sin fronteras.Ver enlace 
Nosotros dejaremos la primicia y descripción al cronista oficial  CCB  en la Web citada, Zarbo Ibarrola y no nos ocuparemos de ella hasta que  se asiente en su zona de invernada o bien desaparezca en el recorrido, ya que aparte de enemigos naturales, la presión cinegética a la cual ya está sometida, moderada aun en Rusia  e intensa en Europa, le va a ser muy difícil alcanzar el  destino invernal.
De cualquier forma Karelia está marcando un hito en la investigación de los movimientos migratorios de la becada a nivel internacional. Por primera vez con documentación en la mano es demostrable que una becada invernante occidental, rebasó los Urales,  asentándose en un territorio de cría asiático –siberiano y por primera vez también y documentado con los datos en la mano de la  RTVS-CCB, hemos podido seguir el comienzo del regreso, la pasa o la emigración postnupcial de una becada.
Creemos que por ello se debe de felicitar, no solo al equipo y dirección del CCB, que lo hicieron posible si no también a todos cazadores de becada, pues aunque haya algún escéptico de miras cortas, cuanto más la conozcamos, más podemos hacer por su caza sostenible.